Amaneció con muchos nubarrones bursátiles que provocaron una sesión marcada por las bajas en Asia. Fue el punto de partida de una jornada en la que la bolsa española registró la segunda mayor caída del año y la quinta de toda su historia, el 6,06%, casi 700 puntos de descenso, hasta situarse en 10.726 puntos, afectada por los problemas del sector financiero internacional y la caída de las plazas extranjeras.

El retroceso de Wall Street el viernes pasado tras la aprobación del plan de rescate del sistema financiero estadounidense, la venta de Fortis a BNP y las ayudas públicas y privadas a la entidad alemana Hypo volvieron a fijar la mirada de los inversores en los problemas del sector bancario y condicionaron la caída de la jornada, en la que el euro bajó hasta la cota de los 1,35 dólares.

El hecho de que nadie dude ya de que la crisis financiera que comenzó en Estados Unidos ha llegado a Europa de forma implacable hizo que se viviera un día de auténtica espiral bajista, con un claro predominio de las ventas a lo largo de la jornada.

En la plaza de Madrid, el volumen de negocio de la jornada fue de 4.727 millones de euros, de los que 919 millones correspondieron a Telefónica; 847 millones, al Santander y 493 millones, al BBVA.

Los bancos cayeron en menor medida que el selectivo, a excepción del Santander, que retrocedió en la misma línea (6,07%). El Sabadell se dejó el 5,65%, más que Banesto (-5,3%), el BBVA (-5,2%), el Popular (-4,06%) y Bankinter (-0,78%).

El mayor descenso del Ibex correspondió a Gamesa, que retrocedió el 14,41%, mucho más que Abengoa (-11,19%), y Acciona (-10,68%), los otros valores que más perdieron. Telefónica, por su parte, se dejó el 5,59%.

No fue la bolsa española la que cerró la jornada con el peor saldo de todas. El Eurostoxx 50 retrocedió el 6,55%; el FTSE de Londres, el 7,29%, el CAC francés, el 8,14%; el DAX alemán, el 7,07% y el S&P MIB de Milán, el 7,74%.