El euríbor, el principal índice hipotecario de referencia para la revisión de los préstamos, volvió a repuntar en mayo casi al 3,31% frente al 3,221% de abril, a falta del último cambio de mañana. Según los cálculos anticipados por el portal financiero Invertia, el incremento ha sido más pausado que en meses anteriores, debido a que las últimas incertidumbres económicas han atemperado las expectativas sobre la escalada de tipos. En todo caso, este indicador se mantiene en máximos desde el verano del 2002 y los analistas pronostican que seguirá repuntando en los próximos meses, aunque a menor ritmo.

En términos económicos, el impacto para los titulares de hipotecas será grande, especialmente en el caso de aquellas personas que revisan sus créditos hipotecarios de forma anual, en cuyo caso el aumento en la cuota mensual en una hipoteca media de 120.000 euros con un plazo de amortización de 20 años es de unos 66 euros mensuales, ya que el índice ha subido 1,12 puntos (del 2,19% de mayo del 2005 al 3,31% de mayo de este año). En el caso de las hipotecas con revisión semestral, el incremento será algo menor.

Los analistas creen que en Europa la situación económica es positiva y que el Banco Central Europeo (BCE) puede seguir encareciendo el dinero paulatinamente sin riesgo a amenazar el crecimiento. Los expertos en política monetaria prevén que el BCE subirá el precio del dinero en la eurozona, actualmente en el 2,5%, en su reunión del 8 de junio, que se celebrará en Madrid.

Ayer mismo, el consejero del BCE Klaus Liebscher insistió en que la autoridad monetaria europea debe vigilar estrechamente los riesgos sobre la inflación. "Tenemos un amplio espectro de riesgos potenciales para la estabilidad de los precios", dijo Liebscher. Dichos riesgos proceden sobre todo del precio del crudo, que sigue muy alto.

A la pregunta de si los tipos de interés en la eurozona subirán más ante esos riesgos, Liebscher dijo: "Supongo que sí ocurrirá". Pese a todo, el consejero del BCE destacó que sigue sin haber síntomas de los efectos de segunda ronda derivados del encarecimiento del petróleo que contaminan los precios de la economía.