Las cajas de ahorros necesitan una inyección urgente de capital de entre 30.000 y 50.000 millones de euros, según estima la consultora PricewaterhouseCoopers. El responsable de la consultora para el sector financiero, Luis de Guindos, explicó ayer que, de otro modo, las cajas de difícilmente podrán desenvolverse en el peor entorno financiero previsto para el 2010, ejercicio para el que se estima una caída de los ingresos de entre el 20% y el 25% en el sector.

Por ello, De Guindos, que fue secretario de Estado de Economía con el PP, urgió a adoptar reformas para favorecer el saneamiento del sector. "El proceso debe ser más intenso, más rápido y distinto", opinó durante la presentación del informe La reestructuración de las cajas de ahorros y la reforma de su regulación .

La mayor parte de la capitalización que precisan las cajas de ahorros debería llegar del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), que tiene una dotación máxima de 99.000 millones. Pero, además, según De Guindos, habría que "obligar" a las cajas "por ley" a emitir cuotas participativas, que son una especie de acciones.

DERECHOS POLITICOS Para hacer más atractivos estos títulos de cara a los inversores habría que dotarlos de derechos políticos, defendió el experto. Y para evitar el miedo a la privatización de las cajas habría que limitar a un máximo del 25% los derechos de voto de los cuotapartícipes. A cambio, debería bajar del 50% al 25% la presencia máxima de las instituciones políticas en los órganos de gobierno de las cajas. Se trata de una fórmula similar a la adoptada en Noruega que sirve de modelo para CCOO.

El texto propone una mayor influencia del Banco de España en las cajas, lo que exigiría un pacto político para eliminar competencias de los gobiernos autonómicos sobre las fusiones de cajas, según De Guindos. Y para favorecer las fusiones interregionales, abogó por la clarificación de los SIP (Sistema Integral de Protección) que permiten a las cajas alianzas para ganar eficiencia sin perder su marca.