Pese a que el efecto de impulso inmediato sobre la economía se cuestiona, la bajada de tipos de interés supondrá un alivio para los hipotecados, ya que el euríbor seguirá a la baja. Eso sí, "más lentamente de lo que sería deseable", afirman los expertos. En todo caso, no significa que haya vuelto la confianza al mercado interbancario, donde el dinero se presta con escasez y a precios muy caros. Algunos expertos esperan que se produzca un cambio en la factura financiera que soportan familias y empresas. "El efecto deseado para las empresas es que disminuya el coste de financiación y que comiencen a acudir al mercado para obtener dinero más barato", dice Ignacio García Nieto, consejero delegado de Riva y García.