Las oficinas de farmacia perdieron entre 1995 y el 2003 hasta 2,5 puntos de margen comercial, hasta situarse en el 26,3% de la composición del precio de venta de los medicamentos; y las distribuidoras, 1,7, hasta el 6,4%. Estos datos figuran en el primer estudio sobre el sector farmacéutico elaborado por la Cámara de Comercio de Barcelona, presentado ayer.

El informe destaca que el sector llega al 65% del valor añadido bruto farmacéutico español, con altos niveles de productividad y de inversión en I+D. Aun así, su rentabilidad está por debajo de la media de la industria.

El estudio servirá para reivindicar la importancia de este ramo ante la tramitación del proyecto de ley del medicamento y para denunciar la continua rebaja de márgenes en el sector que han forzado los distintos gobiernos. Esta política de contención de precios ha afectado esencialmente a la distribución mayorista y a las oficinas de farmacia, según el informe. También "puede suponer una limitación de la capacidad de inversión, creación de empleo e investigación".

El análisis revela también que los precios de los medicamentos en España son inferiores a los de los principales países de la UE.