La economía mundial se encuentra en fase de recuperación y despegue impulsada de nuevo por EEUU como locomotora, según las previsiones que recoge en sus Perspectivas Económicas Mundiales el Fondo Monetario Internacional (FMI). Sin echar totalmente las campanas al vuelo, el economista jefe de la institución, Kenneth Rogoff, aseguró ayer que "hay buenas razones para tener confianza razonable en que la economía global está finalmente saliendo de un agujero muy profundo".

El organismo financiero, que presentó el informe concidiendo con la celebración de las asambleas anuales del FMI y del Banco Mundial en el sultanato de Dubai, en los Emiratos Arabes Unidos, la semana que viene, augura que el producto interior bruto (PIB) mundial registrará un crecimiento del 3,2% este año y del 4,1% el siguiente, al igual que preveía en primavera.

MENOS INCERTIDUMBRES

La diferencia con respecto al informe de abril radica en que al elaborar las previsiones en septiembre se han desvanecido la mayoría de incertidumbres que se cernían sobre la economía, como la guerra en Irak. Ello permitirá retomar la senda de crecimiento durante la última parte del 2003 y con un aumento de la actividad "a un paso un poco más rápido que lo previsto", destacó el alto funcionario.

A su vez, Rogoff subrayó que el crecimiento será desequilibrado, ya que Europa contribuirá menos al dinamismo. El organismo ha recortado las perspectivas de crecimiento para la zona euro hasta situarlas en un 0,5% este año y un 1,9% el siguiente.

El FMI pronostica un crecimiento del 2,6% para este año en EEUU, cuatro décimas más de lo previsto en abril, y del 3,9% en el 2004, tres décimas más. En todo caso, el organismo alerta sobre el déficit por cuenta corriente de EEUU, que ha alcanzado un nivel sin precedentes. Y también sobre el déficit presupuestario. Precisamente Rogoff auguró una caída "brusca" del dólar a medio plazo debido al desproporcionado déficit por cuenta corriente de EEUU. En su opinión este déficit "algún día estallará" y auguró que este hecho se producirá en un plazo máximo de dos a cinco años. El déficit comercial, la diferencia entre las exportaciones y las importaciones, casi se ha quintuplicado desde 1995, según el FMI.

Las presiones inflacionistas se mantiene muy bajas, según el informe. En los países avanzados la inflación prevista para el 2003 se sitúa por debajo del 2% para la última parte del año y en el 1,3% para el ejercicio siguiente.

ALERTA INMOBILIARIA

En países como España cabe el riesgo de que estalle la "burbuja" inmobiliaria, según el FMI. La institución dice que a medida que avance la recuperación subirán los tipos de interés, hoy en mínimos históricos, lo que encarecerá las hipotecas. En el último año, el precio de las casas ha subido un 18,1% en Australia, un 17,8% en el Reino Unido y un 17,5% en España, los países con mayor alza.