Cipriano Arévalo Sánchez, presidente de Funerarias Asociadas Extremeñas (Funasex), asegura que, al contrario de lo que se pueda pensar, no es caro morirse en Extremadura: "No, teniendo en cuenta que hay más prestaciones que hace años, como tanatorio, coches, personal cualificado y uniformado y todos los gastos que conllevan el servicio funerario. Por lo tanto, estamos ya al mismo nivel que el resto de España". Con respecto al seguro de decesos asegura que es conveniente y que no se paga más que si no se tuviera. "Desde que se firma la póliza hasta la fecha de fallecimiento, sabiendo que se paga por la suma de todos los asegurados, si dividimos la suma por los asegurados, no es tanto lo que se paga, teniendo en cuenta las coberturas de la póliza, hospitalización,responsabilidad civil, accidentes y otras coberturas existentes".

El presidente de Funasex considera que los todos los tanatorios deberían tener ISO 2001 de calidad porque constituye el referente básico de calidad en la prestación de servicios. En la actualidad, diversas empresas asociadas a Funasex han iniciado la implantación de dicha normativa. Los tanatorios tienen, además, registrados sus índices de satisfacción pues se pasan unos cuestionarios a las familias después del servicio para que valoren la prestación de los mismos.

Arévalo comenta que la formación ha mejorado mucho gracias a los cursos que se ofrecen desde Funasex para poder profundizar en la profesionalización a todos los niveles del sector. "Es muy importante la formación continua en cualquier actividad, sobre todo para ganar en calidad de servicios y ser más competitivos en el mercado, no obstante, contamos com unos grandes profesionales trabajando en el día a día de nuestro sector", comenta Cipriano Arévalo.

En cuanto al intrusismo cree que hoy en día es menor, pero "se tiene que tener más en cuenta la normativa que regula el sector, para que se pueda quitar el intrusismo y crecer en profesionalidad".

Sobre si es cierto que en algunas ocasiones el personal sanitario avisa a determinados tanatorios afirma: "Yo no sé si eso será así o no. Lo que sí es cierto es que la familia en cualquier caso elige la funeraria que quiere".

Sobre si la incineración es más barata, recuerda que en ésta no existe sepultura ni lápida, pero que los demás gastos de funeral son los mismos. Respecto a la regulación donde se pueden verter las cenizas, comenta que está pendiente de una normativa estatal.

CAMBIO GENERACIONAL Las empresas funerarias --a juicio del presidente de Funasex-- deben contemplar que ya existe un cambio generacional en la demanda de los productos y servicios. Las empresas funerarias invierten en infraestructuras, vehículos, tecnología y tener procesos cada vez más eficientes. Pero la evolución social conduce a las compañías a invertir en el terreno de la creatividad, la innovación y la adaptación a cambios dinámicos del entorno que identifiquen nuevas necesidades y ofertas soluciones prácticas y flexibles que configuran una experiencia positiva para la familia, sensación conjunta que queda tras recibir el servicio.

En cuanto a si imponen en ocasiones los tanatorios determinados servicios, es tajante: "No, nosotros a los familiares les asesoramos en ese momento de los diferentes servicios que ofrecemos, para que pueda elegir y damos la documentación necesaria para el servicio".