El precio de venta de los carburantes ha vuelto a alcanzar niveles récord tras el reciente y persistente encarecimiento del petróleo en los mercados y la pérdida de fuelle del euro con respecto al dólar. El gasóleo, el carburante de uso más masivo --tres de cada cuatro automóviles lo emplean--, se acerca a los 89,50 euros de media en el conjunto de España, aunque en algún surtidor supera el euro.

Con la gasolina sucede algo parecido, ya que el litro se ha situado en una media de 95,22. Incluso en algunas estaciones de servicio llega a sobrepasar el euro por litro. La gasolina siempre sube más que el gasóleo cuando llega el buen tiempo porque en EEUU, el principal consumidor mundial de petróleo y sus derivados, se dispara la demanda de este carburante, el de mayor uso en ese país, de cara a las vacaciones.

Los precios en España se encuentran muy por debajo de la media de los 25 países de la UE. La media del gasóleo está situada en 1,014 euros y la de la gasolina sin plomo de 95 octanos, en 1,15 euros. Pero hay extremos, como el Reino Unido, donde la gasolina está a una media de 1,25 euros por litro y el gasóleo, a 1,301 euros.