Un año después de haber estado al borde del abismo y de declararse en bancarrota para organizar su reestructuración, la nueva General Motors levanta el vuelo y se dispone a volver a cotizar en bolsa tras confirmar su recuperación, con un beneficio neto de unos 1.000 millones de euros en el segundo trimestre.

Los ingresos del fabricante entre abril y junio superaron los 25.800 millones de euros y el beneficio neto obtenido en el primer semestre ascendió a casi 1.700 millones de euros, periodo en el que las ventas mundiales de GM se situaron en 4,15 millones de unidades, un 16,7% respecto al año anterior.

De momento el Gobierno sigue siendo el principal accionista de GM tras ser rescatada con casi 34.000 millones de euros, pero ahora se dispone a presentar su plan para volver a Wall Street.

Los resultados llegan un año después de que Ed Whitacre tomara las riendas del gigante de Detroit, que abandonará su cargo como consejero delegado a partir del 1 de septiembre. El nuevo presidente ejecutivo será Dan Akerson.