El fondo para inyectar hasta 50.000 millones de euros de liquidez en la banca española entrará en vigor a principios de la semana próxima, después de que el Consejo de Ministros aprobara ayer el real decreto que permite su creación. Además, hoy mismo entrará en vigor la ampliación de la garantía sobre depósitos y fondos de inversión desde los 20.000 euros actuales a 100.000 euros por entidad y titular, gracias a otro real decreto que también se aprobó ayer.

En lo que queda del 2008, el nuevo fondo de liquidez hará llegar 10.000 millones a los bancos y cajas que lo soliciten, con el fin de estimular la concesión de créditos a familias y empresas. El resto --hasta 30.000 millones, ampliables a 50.000-- se irá ofertando a lo largo del 2009, mientras persistan las dificultades de las entidades para captar en el mercado interbancario la liquidez que necesitan para su negocio, según explicó el vicepresidente económico, Pedro Solbes.

Para dotar de recursos a las entidades, el fondo les comprará activos "de máxima calidad", a través de un procedimiento de subasta (o similar) que le permita adquirir los mejores títulos al mejor precio, de modo que el coste para los contribuyentes sea nulo. Las primeras subastas se harán en noviembre y diciembre. La gestión del fondo corresponderá al Tesoro y estará sometida a controles de la Intervención General del Estado y del Parlamento, mediante informes cuatrimestrales.

DESTINO FINAL No estaba previsto que el Consejo de Ministros aprobara ayer el real decreto del creación del Fondo de Adquisición de Activos Financieros. Se había anunciado que se estudiaría un borrador para remitirlo al Consejo de Estado y a la Comisión Europea, antes de su definitiva aprobación. Así se lo dijo Solbes al titular de Economía del PP, Cristóbal Montoro, el día anterior. Pero ayer, el Consejo de Ministros, tras haber pedido su opinión al Consejo de Estado, entendió que el dictamen de este no era preceptivo y optó por acelerar el proceso. En esta decisión, sin duda, pesó la cerrazón del PP a dar su apoyo a la medida más potente del Gobierno para afrontar la crisis financiera.

El PP duda de que los fondos públicos inyectados a la banca se traduzcan en más crédito a familias y empresas. Solbes explicó que el fondo primará la concesión de liquidez a las entidades que ofrezcan títulos sobre créditos o hipotecas recientes; pero también se tendrán en cuenta las necesidades de refinanciación de deuda antigua.

Los detractores del fondo también critican que los bancos y cajas lo utilicen para atender los vencimientos de su deuda (20.000 millones en lo que queda de año). Según el ministro, los vencimientos se producirán en todo caso. "Si ponemos una cantidad adicional, habrá más crédito para empresas y familias", añadió Solbes.