El Gobierno aprobó ayer el real decreto que establece la creación de un registro único en el que consten los seguros que cubren el riesgo de fallecimiento del titular. El objetivo del censo, que deberá recoger en el plazo de unas semanas los 50 o 60 millones de pólizas de este tipo que hay en el mercado, es evitar que ningún beneficiario, por desconocimiento, se quede sin la suma que le corresponde. Se estima que uno de cada 10 seguros de este tipo no son cobrados por los beneficiarios por desconocer su existencia.

El registro, que certificará si una persona era o no titular y en qué compañías tenía pólizas, incluirá los seguros en los que se cubre el riesgo de muerte del titular como contingencia principal o accesoria. Esto abarca desde los seguros de vida-riesgo tradicionales, a los del coche, viajes o espectáculos, entre otros.