La recuperación en los últimos meses de las ventas de automóviles en España ha animado al Gobierno a seguir con su política de incentivos. Miguel Sebastián, ministro de Industria, anunció ayer la prórroga del Plan 2000 E hasta finales de este año y la extensión de la medida al 2010 a través de los presupuestos generales del Estado. La decisión, aplaudida por el sector de la automoción, fue criticada por el PP, que tiene preparada una proposición no de ley con la misma petición para debatir el próximo martes en el pleno del Congreso de los Diputados.

El Plan 2000 E , que entró en vigor el pasado mes de mayo, "ha tenido un éxito rotundo que incluso nos ha sorprendido a nosotros mismos", reconoció ayer Sebastián.

El viernes, el Consejo de Ministros aprobará una orden ministerial sobre las condiciones de las ayudas. En todo caso, serán similares a las del plan de mayo --1.000 euros de aportación de las marcas, 500 del Gobierno central y otros 500 por parte de algunas autonomías--, y supondrán una dotación de 40 millones de euros de las arcas del Estado, que permitirá la compra de unos 80.000 automóviles más, un cálculo que se basa en el actual ritmo de ventas. Estas ayudas se suman a los 100 millones previstos en la primera fase del plan.

CAMBIO DE TENDENCIA La buena acogida del plan ha servido para "darle la vuelta al mercado", según Sebastián, moderando las caídas del 40% de las ventas, como se apreció en el primer trimestre del año, e invirtiendo la tendencia hasta aumentar las operaciones en un 20% en apenas cuatro meses.

De esta forma, las matriculaciones en el mes de agosto consiguieron ser las mismas en variación interanual después de 15 meses de caídas, mientras que en septiembre registraron un incremento del 18% en el negocio de turismos y todoterrenos.