El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, cumplirá su promesa de aumentar los impuestos "a los que más tienen" para repartir el coste de la crisis y la decisión se anunciará previsiblemente mañana, cuando el Consejo de Ministros apruebe el proyecto de ley de presupuestos del Estado para el 2011, a cinco días de la huelga general del 29-S.

El Gobierno ultima el diseño de un nuevo tramo en el impuesto sobre la renta (IRPF) para los contribuyentes con rentas más altas, según han confirmado diversas fuentes. Se baraja subir el tipo máximo del impuesto desde el 43% actual al 45% o el 47% para los tramos de renta a partir de 120.000 o 130.000 euros, según fuentes del Gobierno citadas por las agencias Efe y Europa Press. El incremento fiscal afectará a 165.000 ricos en España y a unos 4.000 en Extremadura.

Ayer mismo, la vicepresidenta económica, Elena Salgado repitió que "tal vez" solo se producirá "un pequeño ajuste" para las rentas más altas, sin precisar más. En su respuesta parlamentaria a la diputada popular Luisa Fernanda Rudi, Salgado se permitió una ironía al afirmar que si se pregunta a las personas "que tienen capacidad" si están dispuestas a hacer un esfuerzo adicional, "dirán que sí".

La ministra Salgado se ha resistido cuanto ha podido a contaminar los presupuestos del 2011 con una subida fiscal de escaso impacto recaudatorio, susceptible de ser malinterpretada por los mercados financieros como una debilidad de las cuentas.

Según cálculos de la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas), subir al 45% el tipo del IRPF a rentas superiores a 100.000 euros daría una recaudación adicional de 185 millones (104 millones si el corte es a partir de 150.000 euros). "Son ganas de molestar, por no decir de cabrear", resumió el director de Funcas, Vitorio Valle. Otros cálculos de la asociación de técnicos del Ministerio de Hacienda Gestha apuntan una mayor recaudación de 435,4 millones por subir al 45% la tributación de toda lo que exceda de 120.000 euros. Alrededor de 168.325 contribuyentes (el 0,9% del total) declaran una base imponible superior a 120.000 euros. Lo que paga este colectivo por IRPF equivale al 18,3% del total.

"EQUIDAD" FISCAL Presidente y vicepresidenta llevan meses explicando que el objetivo de una medida de este tipo no sería recaudatorio, sino de "equidad" fiscal, para cargar sobre las rentas más altas algunos de los sacrificios derivados de la crisis.

La ausencia, hasta ahora, de medidas de este tipo es una de las causas que junto a la reforma laboral y de las pensiones justifica la huelga general, según UGT y CCOO. Ahora, su anuncio podría tener un efecto desmovilizador ante la convocatoria, según el análisis de algunos parlamentarios. El secretario general de UGT, Cándido Méndez, opinó ayer que la decisión del Gobierno de subir impuestos a las rentas altas "es un signo claro de que está tomando nota del alcance de la huelga, aunque esta medida es insuficiente".

Mientras tanto, ayer se dio el paso más importante para la aprobación de las cuentas del 2011: tras más de tres semanas de negociaciones, el PSOE y el PNV cerraron, tras un almuerzo en la Moncloa entre Zapatero y el líder del PNV, Iñigo Urkullu, un acuerdo por el que el Gobierno traspasa las políticas activas de empleo al País Vasco. Los nacionalistas vascos logran así su principal condición para apoyar los presupuestos del Estado.

El acuerdo deja en una situación comprometida al lendakari, Patxi López. El PNV se colgará la medalla de haber conseguido una transferencia que el Gobierno vasco no ha podido lograr.