El Gobierno estima que el PIB crecerá este año el 3,2%, lo hará un 2,5% en 2017 y a un ritmo del 2,4% en 2018 y 2019, según el cuadro macroeconómico aprobado este viernes en el Consejo de Ministros y dado a conocer en la rueda de prensa posterior. Estos datos suponen revisar al alza las previsiones. El Gobierno ha fijado un techo de gasto de 118.337 millones de euros para el 2017. Además, se prevé la creación de casi dos millones de empleos en el periodo 2016- 2019, lo que permitirá superar "ligeramente" los 20 millones de ocupados en cuatro años. La tasa de paro se reducirá hasta el 12,8% a finales del 2019, lo que situaría el porcentaje de parados sobre población activa en el nivel más bajo desde el inicio de la recesión.

La previsión es que el límite de deuda, fijado en el 99% del PIB en el 2017, se reduzca progresivamente en los próximos años. El objetivo de déficit del conjunto de las administraciones públicas es del 4,6% para este año, que se distribuye en un 2,2% para la Administración Central, un 1,7% para la Seguridad Social y un 0,7% para las comunidades autónomas, ya que se prevé equilibrio presupuestario (0%) en las entidades locales.

Las medidas de control del déficit deberán ir aparejadas a una serie de medidas de política fiscal con incremento de la recaudación entre lo recaudado por el impuesto de Sociedades, que se prevé de 4.600 millones más, y otros impuestos (3.500 millones). Buena parte de los nuevos ingresos vendrán de la lucha contra el fraude, especialmente por el pago del IVA (con la mejora de los procesos automáticos), hasta alcanzar un incremento de los ingresos equivalente a unos 7.500 millones, según ha afirmado el ministro de Hacienda, Cristobal Montoro, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.

VÍA LIBRE A LA ESTRATEGIA DEL GOBIERNO

El Gobierno ha dado vía libre al límite de gasto no financiero del 2017 para controlar el déficit, que rondará los 118.000 millones de euros, y ha aprobado un real decreto de medidas tributarias para recaudar 8.000 millones de euros más, que afectará básicamente el Impuesto sobre Sociedades y a los impuestos especiales que gravan el alcohol y el tabaco, al tiempo que se creará una nueva figura impositiva para gravar las bebidas azucaradas.

Junto con el techo de gasto, el Gobierno ha aprobado los objetivos de estabilidad para los años 2017-2019, con el horizonte de rebajar al 3,1% del PIB el déficit del 2017, objetivo que, de acuerdo con las previsiones del Ejecutivo está asegurado gracias a este aumento de recaudación, que se sumará a otros 10.000 millones más de ingresos que espera ingresar por la mejora del ciclo económico el próximo año.

La Comisión Europea ha mostrado este viernes su satisfacción por el acuerdo alcanzado entre el Gobierno y el PSOE para aprobar el techo de gasto para 2017 y establecer un objetivo de déficit público para el próximo año del 3,1% del PIB, en línea con la nueva senda fiscal comprometida. "Celebramos el compromiso del Gobierno español con el objetivo de déficit para 2017", ha asegurado en declaraciones a los medios la portavoz del Ejecutivo comunitario en materia económica, Annika Breithardt.

ACUERDO CON EL PSOE

El Ejecutivo de Mariano Rajoy y la formación socialista acordaron este jueves establecer un objetivo de déficit público para las comunidades autónomas del 0,6% para el próximo año, así como un incremento del 8% del salario mínimo interprofesional (SMI) para 2017, hasta los 707,6 euros mensuales en 14 pagas.

Desde el Gobierno garantizan que este techo de gasto de 118.000 millones de euros, similar a lo ejecutado este año, pero inferior en 5.000 millones al techo de gasto que se aprobó inicialmente, permitirá no tener que recortar ninguna partida social, como educación, sanidad o servicios sociales y, al mismo tiempo, gracias al aumento de ingresos tributarios, cumplir con el déficit.

El Ejecutivo pretende consolidar la mejora de los ingresos tributarios por el Impuesto sobre Sociedades, tras el parche aprobado este año --mediante el aumento del tipo mínimo de los pagos fraccionados--, y, con esta finalidad, limitará algunas deducciones, así como la compensación de bases imponibles negativas, pero no se tocarán los actuales tipos impositivos. Las medidas aportarán unos ingreso extra de unos 4.500 millones de euros.

Junto con este incremento, el Gobierno aprobará un aumento de los impuestos que gravan el consumo de alcohol de alta graduación --quedan fuera la cerveza y el vino-- y del tabaco, y finalmente descarta subir el Impuesto sobre Hidrocarburos, ya que penalizaría a autónomos y profesionales en un momento en el que el precio del petróleo está subiendo. Además, el Gobierno creará un nuevo impuesto para gravar las bebidas de alto contenido en azúcar --refrescos básicamente--. Con todas estas medidas, confía en recaudar unos 500 millones de euros, 300 millones procedentes del nuevo tributo y 200 millones por las subidas de especiales.

IMPUESTOS

En el caso del tabaco, Hacienda elevará su fiscalidad y suprimirá el sistema actual de doble mínimo, un tipo impositivo que se incrementa cuando el precio está por debajo de un límite predeterminado, tras la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, que obligó a Italia a suprimir este sistema.

La última vez que el Gobierno tocó los impuestos del tabaco y del alcohol fue a finales de junio del 2013, cuando elevó el tipo específico del tabaco de 19,1 a 24,1 euros por cada mil cigarrillos, mientras que el impuesto mínimo pasó de 123,97 euros a 128,65 euros por cada mil cigarrillos. En cuanto al alcohol, elevé el gravamen un 10% para las bebidas espirituosas, al pasar de 8,30 euros por litro de alcohol puro a 9,13 euros por litro.

Igualmente, el decreto de medidas tributarias recogerá un amplio plan de lucha contra el fraude fiscal y la economía sumergida, que permitirá recaudar, según fuentes de Hacienda, más de 2.000 millones de euros. Como medida estrella incluye rebajar a 1.000 euros el límite de pagos en efectivo desde el 1 de enero de 2017, por debajo del límite actual de 2.500 euros aprobado en 2012. Además, se obligará a las grandes empresas --unas 62.000-- a comunicar a Hacienda en tiempo real las facturas de IVA que emitan.

IVA ELECTRÓNICO

La intención del Gobierno es implantar el conocido como Suministro Inmediato de Información (SII), que consiste en el envío electrónico en tiempo real de todas las operaciones que deben figurar en los libros de registros del IVA de las empresas. El sistema fue ideado por el anterior Gobierno, con la intención de que entrara en vigor el año que viene, pero posteriormente se retrasó su puesta en marcha por la interinidad del Ejecutivo y ahora vuelve a retomarse para reducir la posibilidad de cometer fraude en el IVA.

Además de la limitación del pago en efectivo y del nuevo sistema de envío automático de facturas de IVA para las grandes empresas, el Gobierno también ha incluido en el paquete de medidas antifraude una mayor limitación de los aplazamientos de pago en el IVA y el Impuesto sobre Sociedades porque considera que, en un momento de bajísimos tipos de interés, las empresas no deben financiarse a costa del erario público.

El aumento de los impuestos y las medidas antifraude, así como un recorte del gasto de 900 millones de euros en 2017 como consecuencia de una mayor eficiencia en las administraciones públicas y el recorte de duplicidades, se incluirán en el plan presupuestario para el próximo año que España enviará a Bruselas en los próximos días, en el que también se incluirá el techo de gasto y los objetivos de estabilidad para el periodo 2017-2019 y el nuevo cuadro macroeconómico, que contempla un aumento del PIB del 3,2% para este año y del 2,5% para 2017.