La economía española crecerá el 2,8% este año, dos décimas menos que lo previsto por el anterior Ejecutivo e, incluso, de lo anunciado en un principio por el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Pedro Solbes. El Gobierno aprobó ayer el cuadro macroeconómico que fija los objetivos del 2004 y marca la pauta de los presupuestos del Estado para el 2005.

Tras un Consejo de Ministros más largo de lo habitual donde los responsables de los departamentos discutieron cómo se van a repartir el único tercio que les queda del tope de gasto público (124.525 millones de euros), Solbes admitió que este año habrá un aumento más moderado del empleo y de otros indicadores como la construcción o el consumo eléctrico. Por tanto, un crecimiento del PIB del 2,8% "es más realista" que del 3%, dijo.

Aunque el contexto económico mundial es favorable, Solbes alertó sobre los riesgos que pueden afectar a España como una posible subida de tipos o el déficit comercial del país.

Pero los escollos "más relevantes" que ve Solbes se refieren al precio del crudo --"aunque bajará en septiembre"--, al comportamiento de la eurozona --"si no crece, habrá un impacto en nuestras exportaciones"--, el conflicto en Oriente Próximo, y la situación política en EEUU que, "gane quién gane, cambiará".

BAJAR EL PARO Con todo, habrá una aceleración de la economía española en el 2005 hasta el 3% y una generación de 328.000 nuevos empleos. "Con estos puestos de trabajo deberíamos ser capaces de rebajar ligeramente la tasa de paro del país y absorber el aumento de la población activa", dijo Solbes. El ministro comparó la meta del pleno empleo con la declaración de la Constitución de 1812 en donde se dice que todos los hombres son justos y benéficos. "Es un objetivo y pondremos todos los medios para lograrlo", dijo.

El Gobierno ha introducido en sus previsiones la tasa de productividad por empleado que subirá del 0,7% al 0,9% el año próximo ya que el gran reto de Solbes no sólo es incrementar el empleo sino también la productividad para aumentar las exportaciones. Precisamente, el objetivo de crecimiento para el 2005 se basa en las exportaciones, que mejorarán 1,8 puntos, sobre todo en el mercado europeo. También subirán más de un punto las importaciones pero "la balanza comercial será mejor que este año", dijo el ministro.

CONSUMO El consumo de los hogares se estabilizará en el 3,2% pero bajará el de las administraciones públicas como resultas de la austeridad presupuestaria. Respecto a la formación bruta de capital fijo, destaca la la caída de la construcción.

Con un PIB nominal que crecerá igual que este año (6,3%), Solbes avanzó que los ministros acordaron dar prioridad al gasto en investigación y en infraestructuras. La inversión pública crecerá el 7%. En cuanto a la inflación, el ministro no se atrevió a hacer un pronóstico y se limitó a asegurar que estará por debajo del 3,3% a final de año.