El Gobierno aprobó ayer la segunda aportación al Fondo de Reserva de la Seguridad Social en lo que va de año. La cuantía de ambas ha sido idéntica, 3.500 millones de euros, con lo que el fondo alcanza ya los 26.650,89 millones (44,3 billones de pesetas), equivalente al 3,8% del PIB.

Con esta cantidad, derivada de los excedentes que van generando las cuotas de los afiliados al Seguro, se podrían cubrir seis mensualidades de todos los cotizantes en el caso de una crisis del sistema.

Desde 1999, el 96,04 del superávit de la Seguridad Social se destina a este fondo de reserva. Desde ese año, y gracias a la buena marcha de la economía, los ingresos por cotizaciones han ido superando los gastos derivados de pagar las prestaciones. Sólo en el 2004 las cantidades del superávit que se ingresaron en el fondo alcanzaron los 7.337,99 millones de euros.

Estos excedentes continuarán produciéndose más o menos en la misma medida hasta el 2015, según las previsiones del Gobierno.

RENDIMIENTOS NETOS Una parte importante de los ingresos del fondo de reserva proviene de los intereses que generan estos excedentes. Más de 1.457 millones de euros proceden de los rendimientos netos de los fondos públicos donde están invertidos. En este sentido, el Gobierno quiere que se debata en el Parlamento una ley para permitir al Ministerio de Trabajo invertir este fondo en productos financieros más rentables.

Por su parte, el director general del Instituto Nacional de la Seguridad Social, Fidel Ferreras, solicitó una reforma "suave" del sistema público de pensiones para garantizar su viabilidad futura.