El Gobierno español hará concesiones a la eléctrica alemana E.ON, en respuesta al recurso que planteó la compañía ante las 19 condiciones que le impuso la Comisión Nacional de la Energía (CNE) para quedarse con Endesa, la primera eléctrica española. El acuerdo, promovido por el exministro Carlos Solchaga, se conocerá a finales de la semana que viene, antes del próximo día 12, fecha de la cumbre hispano-alemana, que se celebrará en Alemania.
Entre las condiciones impuestas a la eléctrica alemana por la CNE el 27 de julio figuran la desinversión en centrales nucleares y la venta de Ascó II, propiedad de Endesa; la venta de las centrales de carbón nacional; mantener a Endesa como matriz del grupo durante 10 años, y deshacerse de activos en Ceuta, Melilla, Baleares y Canarias.
Los contactos para llegar a un acuerdo se llevan a cabo entre La Moncloa --apoyados desde el Ministerio de Economía, ante la situación de interinidad del Ministerio de Industria-- y representantes de E.ON al más alto nivel. Están informados altos funcionarios del ejecutivo presidido por Angela Merkel.
Las fuentes españolas consultadas por este diario apuntaban ayer que el Gobierno cederá en alguno de los puntos más conflictivos impuestos por la CNE, como es la citada obligación de desinvertir en todas las centrales nucleares en que está Endesa.
En este contexto, la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, declaraba ayer: "Estoy segura de que llegaremos a un entendimiento" con la Comisión Europea. Pero se mostró convencida de que las condiciones impuestas a E.ON defienden el interés de España.
