Los últimos cultivadores de tabaco de la provincia de Granada, que han pasado en diez años de ser 2.000 a unos 400 actualmente, sufren la falta de relevo generacional, más habitual en otros tiempos, y las restricciones de la Unión Europea, que el año próximo suprimirá las primas al sector. Así lo destacó a Europa Press el gerente de SAT Tabacos Granada, Cristóbal Blanco, quien señaló que los 33 municipios tabaqueros de la Vega granadina producen actualmente 2,5 millones de kilos de producción, cuando en 1989 era de ocho millones. Aún así, el tabaco en Granada genera muchos puestos de trabajo, 100 jornales por cada hectárea, por lo que las 650 de la provincia tienen como consecuencia un total de 97.500 jornales.

"En época de crisis las administraciones deberían dar su apoyo al cultivo, porque puede haber mucha gente que se podría buscar la vida en el tabaco", indicó el gerente, para el que el cierre en 2002 de Cetarsa, la fábrica de tratamiento y procesado, supuso el aumento de los costes para los cultivadores, puesto que la única planta de tratamiento está ahora en Cáceres.