Bancos y cajas de ahorros deberán informar a la Agencia Tributaria de los movimientos reiterados de efectivo superiores a 3.000 euros que realice una misma persona. La medida forma parte del nuevo Plan de Prevención del Fraude Fiscal y será efectiva a partir de enero del 2010, una vez que se ultimen con las entidades los detalles de esta nueva obligación de colaboración fiscal, según explicaron ayer el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, y el director de la Agencia Tributaria, Luis Pedroche.

Esta medida es continuación del plan de control que ha desarrollado Hacienda en los últimos años a partir de los movimientos de billetes de 500 euros. Pedroche dijo ayer que este plan se ha revelado como "uno de los mejores sistemas de selección de presuntos defraudadores con que hemos contado nunca". El fisco ya ha ingresado 212 millones vinculados a este programa; se ha recibido información sobre 12.000 operaciones correspondientes al 2003, 2004 y 2005, y ya se ha abierto investigación sobre más de 2.500 contribuyentes. Ahora, la Agencia pedirá datos sobre el 2006 y el 2007.

Para esquivar al fisco, el movimiento de 500 euros empieza a ser reemplazado por operaciones con billetes de 200 euros y por eso el fisco ha optado por redefinir este programa en función del montante de la operación (3.000 euros)

TIENDAS DE TODO A CIEN La actualización del plan incluye el citado programa sobre movimientos de efectivo, así como un programa especial de control sobre el comercio exterior. Se pretende vigilar las operaciones de importación en la Aduana, en los almacenes mayoristas y en la distribución minorista. El secretario de Estado de Hacienda admitió que se encajará un plan de control sobre las tiendas de todo a 100, habitualmente regentadas por personas de origen asiático, que distribuyen las mercancías de aquellos países.