Hacienda tendrá superávit este año, lo que supone un vuelco respecto de las previsiones presentadas en el Congreso de los Diputados, hace sólo un mes, junto al proyecto de Presupuestos del 2004. El Gobierno presupuesta a la baja los ingresos y al alza el pago de intereses de la deuda. Así es posible encajar imprevistos dentro de la rígida ley de estabilidad presupuestaria. El IEE estima que los presupuestos del 2004 tienen una holgura de 2.000 millones de euros (el 0,25% del PIB). Los ingresos por cotizaciones e impuestos indirectos redondean el superávit del 2003.