Los secretarios generales de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, y de UGT, Cándido Méndez, han confirmado hoy que el 29 de septiembre es la fecha que los sindicatos mayoritarios han elegido para convocar una huelga general contra la propuesta de reforma laboral del Gobierno.

La fecha ya ha sido adelantada esta mañana por el secretario general de la federación del Metal, Afines y Construcción (MCA) de UGT, Manuel Fernández Lito, quien ha recordado que para ese día la Confederación Europea de Sindicatos (CES) ha convocado una movilización en la UE contra los recortes sociales que están decidiendo todos los países miembros.

En rueda de prensa conjunta y multitudinaria, Méndez ha explicado que han constatado que el texto del Gobierno lesiona los derechos de los trabajadores. Para Méndez la reforma es regresiva, no va a generar confianza y va a ser inútil para los problemas del mercado laboral. Esta es la primera huelga general que los dos sindicatos convocan al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y supone la séptima de la democracia.

El "día europeo de acción" consistirá en manifestaciones en Bruselas y en otras ciudades de la UE bajo el lema "no a los recortes, más crecimiento". El secretario de la MCA-UGT ha asegurado que esta situación de crisis económica "se está aprovechando para desmantelar el actual estado de bienestar, incluso en países mejor situados que nosotros, y tenemos que intentar impedirlo".

Temor al trámite parlamentario

Para Lito, de cara al futuro, la situación "puede ser incluso más lesiva para los derechos de los trabajadores que la que contempla el decreto" que prepara el Gobierno, ya que "si se tramita como proyecto de ley nadie, ni siquiera el Gobierno que lo presenta, tiene garantías de cómo puede quedar".

Lito ha advertido que la patronal "ya ha entregado a los grupos parlamentarios una lista con propuestas que se habían descartado durante la negociación, y seguramente alguno de estos grupos se hará eco de esas propuestas, por lo que el PSOE va a tener que pactar porque no tiene mayoría". Además, ha asegurado que los empresarios "perdieron el interés por negociar una vez que el Gobierno anunció una fecha límite y la aprobación por decreto, porque con su actual presidente son más un lobi --o grupo de presión político-- que una organización empresarial".

Por otra parte, Lito ha asegurado que la huelga general "no es comparable" a la que convocaron los empleados públicos y ha asegurado que la intención de los sindicatos es "prepararla con tiempo para que su efecto no sea testimonial". Para ello, ha asegurado que los sindicatos "prepararemos manifestaciones, concentraciones, reuniones con grupos parlamentarios y todo aquello necesario para ganar esta huelga, porque estamos convencidos de que tendrá éxito".