El presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, defendió ayer el "acompañamiento" de la administración pública en las empresas, con la participación en su accionariado. Durante la inauguración en la localidad pacense de Guareña de la fábrica Cerámica Arco de Cáparra, dedicada a la fabricación de ladrillos, señaló que la aportación del Ejecutivo a través de la Sociedad de Fomento Industrial (Sofiex) "no es intervencionismo, como dicen algunos", ya que ese acompañamiento revierte de nuevo a la sociedad, comentó.

Aprovechando la actividad de la fábrica inaugurada ayer, pese a que lleva meses trabajando, resaltó que los empresarios extremeños son "el ladrillo de la economía regional". Además, destacó que la empresa es fruto de la unión de sesenta empresarios del sector del norte cacereño, un ejemplo válido para demostrar cómo hay que actuar, ya que, "tal y como está la pecera, hay mucho peligro de que el pez grande se coma al chico, y es necesario formar un gran pez".

Este agrupamiento empresarial, reiteró, es "un ladrillo más en la construcción de este edificio que se llama Extremadura y que afortunadamente cada día cuenta con más voluntades, con más gente dispuesta y decidida".

En este sentido, el presidente de Cerarca, José Ramón Suárez, agradeció el apoyo prestado por Sofiex --que participa con un 43% del capital social-- para poner en marcha esta fábrica, que trabaja las 24 horas del día todos los días del año y tiene una inversión de 19 millones de euros. Suárez argumentó la instalación en Guareña por la materia prima existente, arcilla, y la buena ubicación con las autovías A-5 y A-66 para exportar el material. Además, subrayó que se debe apostar por la industria, en unos momentos en los que, según dijo, el sector agrario pierde peso en la economía.

Al acto inaugural también acudió el alcalde de Guareña, Rafael Carballo, que agradeció el apoyo institucional y del empresariado para el crecimiento de la localidad.