La crisis no pasa factura a todos por igual. Iberdrola, la mayor eléctrica española, anunció ayer que ganó 2.860,6 millones de euros el año pasado, el 21,5% más que en el 2007, e indicó que va a aumentar la retribución a sus accionistas el 20%, hasta los 0,332 euros por título. La compañía prevé mantener las ganancias y el pago a sus propietarios este ejercicio. El presidente, Ignacio Sánchez Galán, sacó ayer pecho por su gestión. Iberdrola, presumió, ha invertido más de 50.000 millones de euros en lo que va de década y es ya la tercera compañía española por capitalización, tras adelantar al BBVA.

El negocio de renovables y el internacional, más los 552 millones de euros en plusvalías por la venta de activos, explican el aumento del beneficio. Con todo, el grupo ha elevado su endeudamiento del 42,4% al 52,5%. La firma ha renegociado créditos y realizado emisiones de deuda para esquivar la crisis. Galán defendió la congelación salarial de la dirección: "Si apuntamos medidas de eficiencia, deben empezar por los directivos".