El ritmo del viento marcará gran parte del futuro negocio de Iberdrola en Extremadura. Si la Junta se lo permite. La principal compañía energética española ha presentado al Ejecutivo extremeño diez proyectos de parques eólicos que suman 414 megawatios de potencia instalada. Con la luz que producirían estas centrales se podría abastecer al año a casi la mitad del territorio que controla Iberdrola en la región: provincia de Cáceres y parte de Vegas Altas. El Gobierno regional prevé desbloquear el negocio eólico antes del verano. En su mesa hay más de un centenar de peticiones.

El delegado de Iberdrola en Extremadura, David Martín, confirmó ayer estas cifras en Bilbao, en el transcurso de la rueda de prensa previa a la junta de accionistas de la compañía. La empresa reafirmó el compromiso adquirido en febrero pasado con el presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, de invertir 480 millones en la región en el próximo trienio. Más de la mitad sería para energías renovables, casi en su totalidad para la eólica. Otros 140 millones irán a mantenimiento y mejora de las siete centrales hidroeléctricas y la nuclear de Almaraz. Por último, 80 millones servirán para modernizar las infraestructuras de distribución de electricidad.

El otro gran proyecto energético que tiene en Extremadura el grupo que preside Ignacio Sánchez Galán es la central de ciclo combinado de Alange, que utilizará gas natural para producir electricidad. Por el momento, la iniciativa está a la espera de que el Ministerio de Medio Ambiente emita la declaración de impacto ambiental. Si sale adelante tal y como está planteada, la potencia instalada de la central será de 850 megawatios, más del doble de todo el parque eólico regional proyectado por Iberdrola.

Una de las quejas de los clientes extremeños continúa siendo la relativa a los microcortes de luz en viviendas y empresas. Iberdrola defiende que su inversión sigue permitiendo rebajar el tiempo de interrupción del suministro, que en el 2007 ha bajado a una media de 2,13 horas por ciudadano y año (2,33 en el 2006). Desde el 2001, la calidad del servicio ha mejorado un 54%, según la empresa.

"Estamos muy satisfechos en este apartado, hemos hecho un gran esfuerzo para alcanzar estas cotas teniendo en cuenta las adversidades que presenta la región: una población muy dispersa, un importante incremento medio del consumo y un alto nivel de incidencias producidas por la proliferación de la avifauna en los tendidos eléctricos", valoró Martín.

Concretamente, este año la empresa prevé invertir 34 millones de euros en ampliar su infraestructura de distribución, con la construcción de nuevas subestaciones en Arroyo de la Luz, Castuera y Magacela, unos 180 nuevos centros de transformación y cerca de 250 kilómetros de líneas eléctricas.

En cuanto al consumo de luz de los 318.000 clientes de Iberdrola en la región, creció un 1,3% en el último año y un 39% en el último sesenio.

Martín también aprovechó para hacer un balance del plan de inversiones 2003-2007. Iberdrola pactó con la Junta invertir 80 millones para mejorar la calidad del suministro. Finalmente, el montante se ha disparado por encima de los 120 millones, un 50% más de lo acordado.

De cara al futuro, Iberdrola también destaca que realizará compras a empresas extremeñas por valor de 70 millones hasta el 2010, lo que demuestra, a su juicio, su "compromiso con el desarrollo económico y social de esta comunidad".