El principal indicador de la bolsa española, Ibex-35 sufrió esta semana un retroceso del 3,82 por ciento, lo que supone el segundo peor comienzo desde su creación en 1992, lastrado por el temor a la recesión de la economía estadounidense y el elevado precio del petróleo.

Desde su puesta en marcha, el selectivo sólo ha registrado pérdidas en la primera semana de cinco ejercicios y la de este año es la segunda mayor tras la de 2000, cuando cedió el 4,63 por ciento.

El resto de mercados europeos también han comenzado el año en rojo, con caídas semanales del 3,21 por ciento el DAX alemán, del 1,68 por ciento el FTSE londinense y del 2,98 por ciento el CAC parisiense.

Con el descenso, el Ibex-35 finalizó en 14.602,30 puntos, el nivel más bajo desde octubre, cuando los mercados se recuperaban de los severos recortes de agosto por la crisis de las hipotecas de alto riesgo o "subprime" de Estados Unidos y las turbulencias financieras.

En la primera semana de 2008, que sólo contó con tres sesiones debido a Fin de Año, únicamente sumaron avances cuatro de las componentes del indicador, mientras que las 31 restantes perdieron valor. Las caídas más abultadas fueron para Inmobiliaria Colonial, que cedió el 15,96 por ciento y continuó así con el desplome iniciado en las dos últimas sesiones de 2007. Abengoa saldó su estreno en el Ibex-35 con un descenso del 14,14 por ciento, y estuvo seguida de Iberia, que se dejó el 10,67 por ciento ante la falta de noticias sobre su futuro. También cayeron con fuerza las constructoras FCC (9,82 por ciento) y ACS (8,98 por ciento), así como la otra debutante del Ibex, la farmacéutica Griflos, que bajó el 8,83 por ciento,

En el lado positivo de la tabla se situaron Repsol, que ganó el 0,90 por ciento impulsado por los elevados precios del crudo y la próxima venta del 25 por ciento YPF; Sogecable (0,36 por ciento), Aguas de Barcelona y Altadis (0,18 por ciento).