Los mercados recobraron ayer la sonrisa. El tiempo dirá si esta ha llegado para quedarse o lo de ayer fue solo flor de un día, pero lo cierto es que la bolsa recibió una auténtica inyección de optimismo. El Ibex 35 se anotó un alza de cerca de 1.000 puntos y encadenó un nuevo récord. En dos sesiones, el selectivo ha pasado de la mayor caída de su historia, 9,14%, a la mayor subida, el 10,65%, hasta los 9.955,7 puntos. La positiva apertura de Wall Street ayudó a potenciar la ya de por sí muy positiva tendencia del día.

El sector energético fue el más favorecido de esta vuelta de confianza con subidas del 18,8% y del 14,8% para Iberdrola y para Enagás. Otras como REE y Endesa tampoco se quedaron cortas y consiguieron anotarse repuntes del 14,66% y del 12,88%.

El sector financiero, protagonista de las últimas sesiones, también vivió una sesión positiva. Los dos grandes del sector, Santander y BBVA, mejoraron el 12,35% y el 10,16%. Entre los medianos, destacaron Bankinter (14,5%) y Banesto (9,74%). En cambio, Popular (7,3%) y Sabadell (2,92%) se situaron en el vagón de cola de las subidas.

Las compañías constructoras y de servicios, también muy golpeadas por la crisis, vivieron una jornada de compras masivas. Acciona lideró al sector, con un alza del 15,59%, por delante de OHL (15,51%), ACS (8,81%) y Ferrovial (8,62%). En una jornada bursátil en la que ningún valor cerró en negativo, las revalorizaciones más discretas fueron para Indra (1,96%), Repsol (5,52%), Sacyr (7,79%) y Abertis (7,75%).

En el mercado continuo, el sector inmobiliario dio la sorpresa. Tanto Urbas como Afirma consiguieron anotarse subidas del 50% y del 30,43%, respectivamente.

Solo 13 valores cerraron la sesión en pérdidas, con Codere a la cabeza (11% de retroceso). Las cuatro filiales del Popular, que el banco prevé absorber en breve, estuvieron en este grupo desafortunado: Vasconia (0,1%), Balear (0,64%), Castilla (4,16%) y Galicia (6%).