Dublín El ambiente no estaba para celebraciones el pasado viernes, durante la inauguración de la nueva Terminal 2 del aeropuerto de Dublín. Michael O´Leary, el director general de Ryanair, contrario al proyecto, acudió al acto portando una corona y un ataúd para simular el entierro del turismo irlandés. Muchas voces han criticado el coste de la infraestructura, que ha superado los 600 millones de euros, tres veces más de lo presupuestado.