Más de 150 caballos participarán, del 18 al 21 de noviembre, en la XXI edición de la feria Agroganadera de Trujillo, que centrará en ellos su principal reclamo como forma de superar la crisis provocada por la enfermedad de la lengua azul y que deja sin presencia de ganado rumiante al certamen. Junto con esto, según manifestó el alcalde trujillano, José Antonio Redondo, ayer en la presentación oficial del evento en Cáceres, los visitantes podrán disfrutar de "una de las mejores exposiciones avícolas que se podrán encontrar en la región".

El primer edil de la ciudad, presidente además de la institución ferial, anunció que aún no descartan la posibilidad de celebrar una subasta de bovino y ovino antes de que finalice el año. "Sabemos que esto es muy complicado, pero si las condiciones lo permiten, estamos decididos a realizarlo", afirmó.

Redondo, al que acompañaron representantes de la organización y la entidad patrocinadora, Caja Duero, afirmó que se barajaron tres opciones obligadas por la crisis de la enfermedad de la lengua azul: retrasar la feria, lo que resultaba inviable, no hacerla, que sería injusto a su juicio para todas las personas que ya lo tenían todo preparado y hacerla de la forma más digna posible, que fue la opción elegida.