Aunque las condiciones que ofrecen las nuevas tarifas planas para teléfonos móviles son generosas, las promociones de voz y datos incluyen siempre un límite, porque las operadoras están escarmentadas de lo que consideran abusos de usuarios sobre sus redes.

Yoigo fue la primera compañía en sufrir la picaresca. Cuando lanzó una tarifa a 0 euros el minuto entre clientes de la operadora, tuvo que limitar el servicio a una hora pocas semanas después por "los abusos de algunos". Algunos locutorios usaban las tarjetas de la operadora como teléfonos públicos. Sin embargo, la decisión de Yoigo motivó las quejas de los consumidores que habían firmado un contrato con otras condiciones.

En Gran Bretaña también hubo un caso similar porque los usuarios usaban el móvil como aparato de radio para controlar a los niños que es-taban en otras habitaciones.