Las bolsas mundiales continuaron ayer la caída iniciada la semana pasada, acuciadas por peores expectativas económicas y los malos resultados empresariales del primer trimestre presentados por empresas de EEUU, como IBM y General Motors.

Los principales índices continentales se situaron por debajo del inicio del ejercicio. El Ibex 35, que agrupa a los valores más capitalizados del mercado español, cerró en 9.025 puntos, con una caída del 1,4%. Con respecto al inicio del ejercicio, el indicador cede un 0,61%, por lo que se sitúa en números rojos. El mercado español aguantó mejor los descensos que la mayoría de parquets europeos, donde las caídas fueron más acusadas.

"Hay mucho nerviosismo en el mercado", comentó David Cabezas, analista de Renta4. "Los inversores dudan sobre si las empresas podrán mantener el crecimiento de los resultados, pero es pronto para hablar de un cambio de tendencia", agregó.