Familias y empresas han puesto freno a su deuda, al tiempo que han optado por concentrar su ahorro en activos más líquidos, como los depósitos, en detrimento de los fondos de inversión. Así lo confirma el Banco de España en su último boletín económico, a partir de datos de marzo y abril. Las tasas de expansión anual del crédito a familias y empresas fueron del 11% y el 15% (frente al 21% y el 28% en el pasado reciente). Los tipos de interés de las hipotecas y los depósitos de las familias bajaron en marzo hasta el 5,43% y el 2,78%. El de los créditos para consumo subió al 8,55% y el de empresas siguió en el 5,65%.