Microsoft, el gigante informático creado por Bill Gates, ganó en el último trimestre del año pasado algo más de 2.550 millones de euros (424.284 millones de pesetas), lo que representa el 11% más que en el mismo periodo del año anterior. Un comunicado del jefe financiero de Microsoft, John Connors, explica que la compañía ha dado resultados "sólidos" en todas las divisiones, a pesar de del "desafiante ambiente económico mundial".

Estos beneficios se consiguieron pese a que la compañía se vio obligada a gastar en pleitos 210 millones de euros. La empresa logró ingresar 8.540 millones de euros (1,42 billones de pesetas) por ventas el año pasado, el 10% más que en el 2001.

A pesar de todos estos buenos datos, Connors advirtió de que no tienen previsto aplicar un aumento significativo del gasto en nuevas tecnologías a corto plazo, aunque se mostró "optimista" sobre el futuro del sector.

Las palabras de Connors provocaron una reacción negativa entre los inversores norteamericanos, que castigaron el valor. La alegría con que los accionistas recibieron estos resultados se duplicó al conocer que la junta directiva de Microsoft había decidido entregar un dividendo de 16 centavos por acción, algo que nunca había sucedido desde que la empresa comenzó a cotizar en 1986. La junta anunció también una operación de división del valor de las acciones. Connors explicó que este gesto busca demostrar la confianza en Microsoft.