La mitad de las 2.400 pescaderías de Cataluña se vieron obligadas ayer a cerrar sus puertas ante la falta de pescado para suministrar a sus clientes. El resto de comercios que permanecieron abiertos tenían muy pocos productos a la venta, aproximadamente un 10% de los que habitualmente tienen. La afluencia de los consumidores, ante esta situación, fue escasa. Sin embargo, hoy, tras el desbloqueo de los puertos, se espera que el abastecimiento de pescado vuelva a la normalidad. Las grandes superficies se han abastecido esta semana de los mercados centrales de abastecimiento de Zaragoza y Madrid.