El déficit de las administraciones públicas se disparó en el 2008 hasta el 3,82% del producto interior bruto (PIB) por efecto de la crisis económica. Tras tres años de superávit, las cuentas incurrieron de golpe en el 2008 en el déficit más elevado desde 1996, que deja a España fuera de la referencia del 3% del PIB que marca la Unión Europea.

Para el 2009 el panorama es aún peor. La previsión de déficit para el 2009 se fijó en enero en el 5,8% del PIB. Eso fue hace mes y medio, antes de que el Gobierno admitiera que el gasto en prestaciones por desempleo va a ser, al menos, 10.000 millones superior a lo estimado, lo que podría llevar al déficit al entorno del 7% del PIB. Para compensarlo, el Gobierno aprobó hace quince días un recorte de gastos en los ministerios de 1.500 millones. El secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, anunció ayer que a lo largo del año se adoptarán nuevos recortes para evitar que el déficit se desboque.

NO SE SUBIRAN IMPUESTOS "Vamos a seguir reaccionando a lo largo del año. Vamos a actuar para que no se produzca un deterioro importante del déficit", dijo ayer Ocaña. El secretario de Estado apuntó a nuevos recortes del gasto, pero admitió que "la caja de herramientas incluye ingresos y gastos". Ocaña descartó subir los impuestos y sobre los impuestos especiales, dijo que no se atrevía a descartar cambios "en el horizonte de uno o dos años".

Desde algunos partidos de la oposición se ha sugerido al Gobierno la supresión de la nueva deducción de 400 euros en el impuesto sobre la renta. La semana pasada, el diputado de IU-ICV Joan Herrera propuso esta medida al vicepresidente Pedro Solbes y este respondió con un lacónico "tomo nota". Otros grupos estarían dispuestos a apoyar la retirada de esta deducción que, en el 2009, restó 4.500 millones al IRPF, según datos de Hacienda.

DESGLOSE DE DATOS Del déficit del 3,82% del PIB registrado por el conjunto de administraciones (41.874 millones) 2,74 puntos (30.047 millones) corresponden a la Administración central; otros 1,45 puntos, a las autonomías y 0,39, a corporaciones locales. La Seguridad Social anotó un superávit del 0,76% del PIB, el 40% menos que el 2007.

El déficit del Estado es consecuencia de la caída del 18,2% de los ingresos. En los gastos, destaca el aumento de las prestaciones por desempleo que causó un déficit de 5.489 millones en el Servicio Público de Empleo.

De los 30.000 millones de déficit del Estado, 20.000 millones se deben a rebajas fiscales y aplazamientos de pagos a empresas. En el 2009 se sumarán 11.200 millones de gasto del Fondo de Inversión Municipal y de medidas de apoyo al empleo, así que las medidas de estímulo fiscal supondrán el 2,3% del PIB.