A pesar de que el precio del petróleo prosigue en su desplome, la organización de países exportadores, la OPEP, ha decidido mantener la producción de crudo. Ya en los niveles más bajos en cuatro años, el que ha sido el principal indicador y causa de crisis económicas globales en el pasado está de nuevo en el centro del huracán.

El precio del crudo Brent, de referencia para Europa, ha caído hasta por debajo del nivel de los 70 dólare. Pese a que el precio de las gasolinas en España no lleva el mismo ritmo de caída, cualquier consumidor es consciente del abaratamiento.

La cumbre de la OPEP celebrada en Viena ha optado por mantener los actuales niveles de producción, a pesar de que la cotización ha caído en torno al 30% en seis meses. "Conforme con el interés de devolver el equilibrio al mercado, la Conferencia (ministerial) ha decidido mantener el nivel de producción de 30 millones de barriles diarios", ha anunciado el cártel petrolero al término de su reunión.

Arabia Saudí y a sus vecinos del Golfo declararon este miércoles a Reuters que se oponían al recorte de la producción y que están dispuestos a mantener los precios bajos durante el próximo 2015. Las razones del planteamiento se centran en la conveniencia de no lastrar la recuperación económica de Europa y de EEUU. Un efecto colateral de una subida de los precios del petróleo sería elevar la inflación también en China y causar una depresión a escala mundial.

VENEZUELA, AL FRENTE

Los demás miembros de la organización, y en particular Venezuela, abogan sin reservas por ese recorte productivo como una fórmula relativamente rápida de conseguir un precio por barril en el entorno de los 100 dólares. Venezuela estima el exceso de crudo en el mercado en unos dos millones de barriles de crudo al día. La negociación ahora es de que manera se puede repartir ese recorte. Además de Venezuela, Nigeria y Ecuador lideran la posición más favorable a los recortes. Irán se ha mostrado inflexible al asegurar que no está dispuesto a recortar más la producción tras haberlo hecho en 1,5 millones de barriles diarios por las sanciones derivadas de su programa nuclear.