Los pedidos en la industria alemana aumentaron un 2,3% en junio en relación al mes anterior, lo que supone una señal alentadora de mejora de la coyuntura de la locomotora de la zona euro. Esa evolución se debió a la demanda exterior, por lo que los analistas prefieren mantener la prudencia. Los pedidos industriales del extranjero progresaron el 5,7%, debido a la mayor estabilidad del euro. En la zona oeste, los pedidos aumentaron un 2,6% y en el este bajaron el 1,3%.