El éxito sorprendió a la propia empresa. La movilización de recursos sin precedentes en apoyo del euro cotizó ayer al alza en todos los mercados financieros. ¡Y cómo! El Ibex 35 de la bolsa española registró la mayor subida en un día de su historia: el 14,43%, algo más de lo que perdió en toda la semana pasada, una de las más crudas de los últimos tiempos. Así, con su tendencia bipolar, la euforia siguió al pánico. Sobrerreaccionaron los índices del mismo modo que antes se habían pasado de frenada.
Unos mercados sin aliento encontraron oxígeno en el compromiso de España y Portugal de reducir su déficit. Los inversores aplaudieron la decisión y la de crear un fondo de 750.000 millones de euros para comprar deuda de los países en apuros. El resultado fue que todas las bolsas europeas registraron alzas sin precedentes, que en el caso español tuvieron sello de récord.
La actual crisis financiera ha provocado un largo registro de bajadas y subidas espectaculares en los mercados de todo el mundo. La más abultada hasta ayer en la bolsa española se había producido el pasado 13 de noviembre del 2008, cuando se dieron a conocer las primeras medidas de los bancos centrales para apoyar al sistema financiero. En esa ocasión, el Ibex 35 subió el 10,65% en una única jornada. Dos semanas después, el 24 de noviembre, ganó el 8,13%, y cinco días más tarde de esa fecha volvió a revalorizarse por encima de 10%.
OPTIMISMO DESBORDADO El resto de mercados experimentaron una jornada de optimismo desbordado. Portugal y Grecia subieron más del 10%. El mercado parisino mejoró el 8,92% y los de Fráncfort y Londres se movieron por encima del 4%. Contribuyó a los ascensos que Wall Street abrió con una remontada del 4% para ratificar el calificativo de jornada excepcional en los mercados bursátiles. La evolución de la renta variable se vio acompañada por un descenso notable de la prima de riesgo de la deuda de los países periféricos, especialmente Grecia, España y Portugal. El diferencial del bono español con el alemán descendió a los 100 puntos básicos y se aleja del máximo histórico de 164 puntos marcado el pasado viernes. La rentabilidad del bono español cae por debajo del 4%, en niveles de hace dos semanas.
La deuda soberana más beneficiada por el rescate europeo fue la griega. La rentabilidad de su bono ha caído hasta el 6,3% desde el máximo histórico del 12,449% del viernes pasado. Además, la curva de la deuda griega recupera su normalidad. Tras permanecer invertida los últimos días, es decir, con los activos a corto plazo rentando por encima de los activos a largo plazo, vuelve a presentar una pendiente positiva.
"No se trata del apoyo al euro: la moneda europea aún cotiza por encima del valor que le corresponde en este momento. La cuestión es el compromiso para reducir el déficit por parte de España", comentó Jaume Puig, director general de la consultora GVC Gaesco. "Es preferible tomar las medidas que pide el mercado antes de que nadie te tenga que obligar, como ha ocurrido con Grecia. Si se elimina la posibilidad de contagio, se ha acabado el problema", agregó.
El compromiso presupuestario, en todo caso, se vio acompañado por el hecho de que varios bancos centrales iniciaron la compra de deuda estatal de España, Portugal, Grecia, Italia e Irlanda, siguiendo una de las decisiones del consejo de gobierno del Banco Central Europeo (BCE). Esta medida contribuyó a impulsar al euro hasta rozar los 1,31 dólares. La autoridad monetaria europea estableció el cambio oficial en 1,2969 dólares, lo que supuso un alza importante frente a los 1,26 dólares por euro registrados la semana pasada, el nivel más bajo hace más de un año.
En la bolsa española, los valores más favorecidos por la recuperación fueron los grandes bancos. Nadie recuerda en el parquet una sesión en la que los pesos pesados del Ibex registraran una subida en su cotización por encima del 20%. Ayer, tanto el Santander como el BBVA se dispararon sobre ese porcentaje.
El resto de la banca se movió con alzas superiores al 15%, pero también otros valores del selectivo española, con Telefónica a la cabeza. El valor con mayor ponderación en el índice ganó el 12%. "La reacción es lógica: las valoraciones del Ibex han llegado a estar incluso por debajo de la rentabilidad por dividendo. Telefónica comenzó ayer con un PER --precio de la acción dividido por el beneficio neto-- de 8,5 veces y una rentabilidad por dividendo del 9,1%.
