Son muchos los españoles que se plantean si contar con un seguro de vida compensa. Es cierto que no es obligatorio y que requiere de pagar una póliza, pero resulta muy conveniente en el caso de contar con una propiedad hipotecada, si se tienen hijos que están estudiando o cuando se quiere dejar a la familia en las mejores condiciones, en el caso de que el asegurado acabe con una invalidez o fallezca. Incluso se puede contar con un seguro de este tipo con el objetivo de conseguir una rentabilidad futura. No es cuestión de ponerse en lo peor, tan sólo hay que tratar de proteger aquello que resulta más importante para cada uno. En este caso, la familia. Se calcula que, a día de hoy, son más de 30 millones los españoles que cuentan con este tipo de seguros. Por si te quedan dudas vamos a ver, al detalle, para qué sirve un seguro de vida.

  1. Aporta tranquilidad familiar. Como ya veníamos comentado este es el principal factor a tener en cuenta. Muchas aseguradoras tienen, además de la cobertura básica (que contempla el fallecimiento con el objetivo de proteger a la familia y que es muy acertado en el caso de que el asegurado sea quien mantiene a los suyos en el ámbito económico) una cobertura para el caso en el que el asegurado sufra un accidente que le deje inválido.
  2. Protege la hipoteca. De hecho, hay unas cuantas entidades bancarias que ofrecen mejores condiciones a sus clientes en el caso de que éstos cuenten con un seguro de vida vinculado. Es la forma de asegurarse de que, si la persona que paga las cuotas falta, el seguro se haga cargo de seguir pagando.
  3. Una forma de garantizar los estudios. Como en todo lo comentado anteriormente, si la persona que es el sustento de una familia fallece todo lo que lleva vinculado un coste puede salir perjudicado. En este caso, los estudios de los hijos que se encuentran en la universidad y que no resultan baratos. Una manera de asegurarse de que los hijos podrán seguir aprendiendo y labrándose un futuro es contando con este tipo de seguros.
  4. Ayuda en caso de enfermedad. Además de lo ya comentado con respecto a que el seguro de vida protege al asegurado en el caso de quedar invalido no hay que olvidar que también se puede hacer uso de éste en el caso de que se padezca una enfermedad, que para nada tiene que ser mortal, pero sí grave y que, al menos durante un tiempo, imposibilite la labor de llevar a cabo la actividad habitual de esa persona.

Pese a todos los motivos actuales que existen para contar con un seguro de vida son muchos los que aún tienen dudas y se pierden en las gestiones a llevar a cabo para poder tramitarlo. Por suerte Internet pone esta labor todavía más fácil. Sin mayores complicaciones y desde la tranquilidad del hogar se puede calcular cuál sería la póliza y resolver todas las dudas que se puedan generar.