El paro subió en Extremadura un 9,05% (5.138 personas) durante el 2002, según datos del Ministerio de Trabajo. El dato se explica en parte, señaló ayer la Junta de Extremadura mediante un comunicado, por el peso del sector de la construcción en el incremento general del paro, ya que, de los 5.138 nuevos parados, 1.666 eran trabajadores de ese sector, es decir, más de un 30 por ciento.

En diciembre la subida fue del 4,82% respecto al mes anterior, un aumento motivado por el incremento del desempleo en la construcción durante diciembre por la rescisión de muchos contratos de trabajadores que vuelven a ser contratados pasadas las vacaciones de Navidad.

Según información facilitada por el gabinete de prensa de la Junta de Extremadura, para explicar el peso del sector de la construcción en esta subida del paro, es significativo el dato de que, de las 2.846 personas que pasaron a la lista de desempleados, un total de 2.219 eran trabajadores del sector de la construcción, es decir, un 78% de los nuevos parados corresponden a ese sector.

SEGUNDO EJERCICIO

El aumento del paro en el sector de la construcción durante el mes de diciembre en Extremadura fue de un 28,65 por ciento, mientras que la media del resto de los sectores en la región era de un 1,22 por ciento, lo que pone de manifiesto también la importancia de esa subida circunstancial del paro de la construcción en el dato global del incremento del desempleo.

En España, al finalizar el año había 113.224 parados más que en diciembre del 2001. Este incremento, por segundo ejercicio consecutivo, convierte el 2002 en el peor año en cuanto a paro del último decenio, sólo superado por la crisis de 1993.

Con los 10.100 desempleados más registrados por las oficinas del Inem en diciembre pasado, el 2002 concluyó con 1.688.068 demandantes de empleo, lo que supone una tasa de paro del 9,14% de la población activa del país.

La tendencia de reducción del desempleo se rompió en el 2001 con un incremento de 18.462 parados. Tanto en el 2001 como en el 2002, el aumento del paro se produjo a pesar del crecimiento económico, que en el 2002 rondará el 2%.

En cambio, los 345.436 desempleados más con los que terminó 1993 se debieron a la profunda crisis de ese año, en el que el producto interior bruto (PIB) cayó el 1,2%. El incremento interanual del 7,19% de la cifra de desempleados no se debe a la destrucción de puestos de trabajo, según el ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, sino a que hay más gente que quiere entrar en el mercado laboral que nuevos empleos.