La tensión estalló ayer en la huelga convocada en las empresas auxiliares de la refinería de Repsol en Puertollano. La Policía Nacional cargó contra unos 2.000 huelguistas que bloqueaban el acceso al complejo petroquímico en demanda de mejoras laborales y provocó contusiones a varios trabajadores.
En el quinto día de huelga convocado por CCOO y UGT, los empleados de las empresas subcontratadas impidieron la entrada de los trabajadores de Repsol y Fertiberia. Después de un primer aviso de los agentes antidisturbios para que los huelguistas desbloquearan la calzada, se produjo un incidente cuando un conductor intentó franquear la barricada de neumáticos y se enfrentó al piquete esgrimiendo una navaja. La policía intervino para que el conductor se alejara.
TRES HERIDOS
A las 8.50 horas, los agentes dieron un nuevo aviso e iniciaron la carga policial para desbloquear los accesos. Algunos trabajadores respondieron lanzando piedras y otros objetos. La intervención policial causó contusiones a varios manifestantes y a algún periodista. Tres heridos tuvieron que recibir atención médica.
Los dirigentes de los sindicatos pidieron la dimisión del subdelegado del Gobierno en Ciudad Real, Jaime Lobo, a quien responsabilizaron de la carga "injustificable y desproporcionada".
El presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, pidió al ministro del Interior, Angel Acebes, en una conversación telefónica, que "se atemperen" las instrucciones dadas a la policía para disolver la protesta de trabajadores y que tenga en cuenta las "circunstancias" especiales que concurren en Puertollano, en referencia a los nueve trabajadores que murieron en verano en la explosión registrada en la refinería.
El jefe del Ejecutivo autonómico señaló que los trabajadores "sólo han cortado vías de acceso al complejo, y no una carretera".
La directora general de Trabajo de la Junta, María José López, se desplazó hasta Puertollano y mostró la disposición del Gobierno regional a mediar en el conflicto surgido entre empresarios y sindicatos. Para mañana está convocado el sexto día de huelga en el conflicto.
DEMANDAS SINDICALES
El conflicto laboral que afecta a las 70 empresas auxiliares de la planta petroquímica de Repsol tiene su origen en la demanda de nuevos complementos económicos y no tiene relación directa con el accidente laboral que costó la vida a nueve trabajadores.
Los sindicatos CCOO y UGT piden a las empresas la concesión de un plus por las paradas de actividad programadas y otro para complementar sueldos que consideran bajos. Un oficial de primera de la refinería de Puertollano cobra menos de 1.000 euros (166.386 pesetas) brutos al mes, según datos de los sindicatos.
