Desplome. El precio de la luz para este jueves experimentará un descenso del 29% en una sola jornada, hasta los 49,01 euros megavatio (Mwh), según los datos del operador del mercado (Omie).

Esta evolución, tras las escaladas experimentadas durante el mes de enero, no hace más que reflejar los defectos de un mercado en el que predomina la volatilidad, según los expertos. El récord en lo que va de año y que situó el precio al nivel de hace cuatro años, se alcanzó hace una semana, con 91,88 euros.

El nivel por debajo de los 50 euros de media no se había visto aún este año, ya que en enero, que comenzó con 51,09 euros, se vivió un auténtica escalada de los costes. Estos precios, que varían cada hora, son los que sirven para fijar en torno al 40% del recibo de los usuarios sujetos a la tarifa regulada o PVPC.

BALÓN DE OXÍGENO

El Gobierno, que a través del ministro de Energía, Álvaro Nadal, se negó a reformar el funcionamiento del mercado, consigue un importante balón de oxígeno en caso de que se mantenga la tendencia a la baja. El hecho es que las alzas se trasladan a la misma velocidad al recibo de los 12 millones de usuarios de la tarifa regulada o PVPC que las bajadas supone un alivio.

De hecho, durante la mayor parte del año, el PVPC sale más ventajoso que los contratos en el libre mercado, que tienen otros 13,8 millones de consumidores. La factura regulada de enero registra un encarecimiento de alrededor del 25% respecto a un año atrás, y del 9% frente a la de diciembre.

A medida que aumente el uso de centrales hidroeléctricas y de energías renovables, como la eólica, se abaratará el precio. El mercado funciona de manera marginalista. Así, la última central con la que se cubre la demanda es la que fija el precio para el conjunto.

En las últimas semanas, por el auge de la demanda y el descenso de la lluvia y del viento, esta tarea recayó esencialmente sobre los ciclos combinados, que utilizan gas, que se encuentra en unos niveles de cotización mu y elevados. Esto fue lo que llevó al ministro Nadal a anunciar reformas para introducir competencia en el mercado secundario del gas, Mibgas.