El Eurogrupo, el Consejo informal de ministros de Finanzas de la zona euro, expresó ayer su "preocupación" por la evolución de la situación económica europea. También mostró su "inquietud" por las marcadas divergencias de crecimiento entre los distintos países de la unión monetaria.

El optimismo aportado por el elevado crecimiento de Alemania en el primer trimestre, el 1% trimestral, está contrarrestado por la entrada en recesión de Italia, la caída del -0,1% de Holanda, el estancamiento de la economía belga, el alza del precio del petróleo y la pérdida de confianza de consumidores e inversores.

El vicepresidente económico español, Pedro Solbes, expresó su "inquietud por el bajo crecimiento económico en Europa", con una tasa del 0,5% trimestral y del 1,4% anual en el primer trimestre. Solbes destacó la buena situación comparativa de España, aunque reconoció graves problemas en inflación, pérdida de competitividad y déficit de la balanza exterior.