El presidente de Seat, Erich Schmitt, ha recordado que las medidas laborales que han refrendado los trabajadores de la compañía para optar a la fabricación del Audi Q3 no prevén los dos años de congelación salarial que exige Volkswagen para asignar el nuevo modelo a la planta de Martorell.

Schmitt ha asegurado, durante la presentación de resultados de la compañía, que el voto favorable de los trabajadores a la propuesta del sindicato UGT, que plantea congelar los sueldos el 2009 e incrementarlos la mitad del IPC en el 2010, es "un paso en la dirección correcta", aunque no definitivo para la adjudicación del todocamino.

En este sentido, el presidente de Seat ha señalado que este documento, "por desgracia, no dice nada" de los dos años de congelación salarial que pide Volkswagen para reducir costes laborales y hacer competitiva la factoría de Martorell. "La competencia con las otras plantas [del grupo] va a ser altísima y la decisión dependerá de muchos factores económicos", ha manifestado. Schmitt ha afirmado que él, personalmente, ha hecho "todo lo posible" para lograr la concesión.

Schmitt ha lamentado, no obstante, que los sindicatos no llegaran antes a un acuerdo a la hora de pactar los ajustes laborales que están dispuestos a aceptar para producir el Q3 y evitar así el excedente de 1.500 trabajadores que la empresa sostiene que tiene la planta barcelonesa. Un 65,5% de los trabajadores de Seat han aceptado la congelación salarial que propone UGT.

Necesidad de una propuesta formal

La consulta, vinculante, debería contar ahora con el apoyo de CCOO y CGT, sindicatos que se han opuesto desde un principio a que se congelen los salarios como condición imprescindible para producir el Q3. El resultado de la votación de la plantilla, no obstante, no tiene para Seat valor legal, ya que la representación de los trabajadores la ostenta el comité intercentros.

"Necesitamos una declaración clara del comité para saber en qué condiciones los tres sindicatos nos van a permitir presentar una oferta, pero hoy no tenemos una declaración vinculante del comité", ha subrayado Schmitt. El vicepresidente ejecutivo de Recursos Humanos de Seat, Ramón Paredes, ha reiterado que la empresa necesita una propuesta "formal" por parte del comité intercentros.

Cuando la tenga, la trasladará a la dirección de Volkswagen, para que la valore a la hora de decidir a qué planta asigna el nuevo modelo de Audi. Paredes ha recordado que la decisión última de qué planta ensamblará en Q3 la tiene la cúpula del consorcio alemán.

El balance del 2008

El referendo coincide con el anuncio de que Seat ha cerrado el 2008 con un resultado después de impuestos de 44,4 millones de euros, gracias, en parte, al ingreso de los dividendos de las participadas del grupo, entre ellas la filial de cajas de cambio Gearbox, según ha informado hoy en rueda de prensa la filial de Volkswagen.

Los datos operativos presentados hoy por Seat duplican los que anunció la pasada semana el grupo Volkswagen, según los cuales la filial tuvo el año pasado una pérdida operativa de 78 millones de euros. Ello se debe, según ha explicado el vicepresidente ejecutivo de Finanzas de Seat, Dieter Seemann, a que la filial ha elaborado su informe de acuerdo con el plan contable español, mientras que Volkswagen lo hizo en concordancia con los estándares internacionales.