La plantilla del Banco de Inglaterra ha iniciado su primera huelga en 50 años. El colectivo persigue una subida salarial impedida por las limitaciones en las retribuciones en el sector público británico. Aunque se trata de una entidad independiente del Gobierno, el alza salarial está limitada al 1%.

El paro de tres días afectará a una reunión del consejo del banco central inglés en la que debe tomar una decisión sober los tipos de interés. La huelga afecta al personal de mantenimiento y seguridad de la entidad, que tiene 323 años.

MÁSCARAS

Algunos representantes de este colectivo se han manifestado mediante máscaras con el rostro del gobernador del banco, Mark Carney, frente a la sede de la institución en Londres.

En los departamentos afectados trabajan unas 150 personas. La protesta, convocada por el sindicato Unite, está dirigida contra la "irrisoria" subida salarial que se ha impuesto por parte del banco sin un acuerdo con los sindicatos.