La empresa portuguesa Productos Tartáricos Internacional ha anunciado el cierre de su factoría instalada en el municipio pacense de Villafranca de los Barros. La dirección de la firma, dedicada a la transformación del ácido tartárico, realizó el anuncio la pasada noche a un grupo de trabajadores, con lo que pondrá fin a siete años de presencia en esta localidad.

La decisión de la directiva de la empresa supone el capítulo final de una larga crisis que en los últimos meses había mermado el ánimo de todos los trabajadores, que ya contaban con la posibilidad de que se produjera una situación similar. La principal consecuencia del cierre será que unos veinticinco trabajadores se quedarán en paro.

En un a primera fase, la firma Productos Tartáricos Internacional invirtió más de 4,2 millones de euros (unos 700 millones de pesetas) en la puesta en marcha del proyecto empresarial instalado en Villafranca de los Barros, de los que el 36% fueron cofinanciados por el Gobierno central, la Administración regional y la Unión Europea.

La empresa se dedicaba a la producción y transformación de ácido tartárico y crémor tartárico, unos productos que tienen múltiples aplicaciones en industrias del sector conservero, como son las de bebidas alcohólicas, químicas, textil o farmacéutica, entre otras.

INTENTOS FALLIDOS El delegado sindical manifestó que en los últimos meses, tras la crisis que padece el sector, se han hecho esfuerzos por buscar a algún inversor interesado en hacerse cargo de la fábrica, a fin de poder mantener la actividad de la misma. No obstante, la intención de la dirección de la empresa no ha salido adelante y su decisión ha sido la anunciada a los trabajadores: el cierre de la factoría de Villafranca.

Las instalaciones se encuentran junto a la Nacional 630, a pocos metros de la estación depuradora de aguas residuales.