Las pymes de Extremadura son las peores en eficiencia energética de España, con un índice de tres puntos, el mismo que en el año 2006, según un estudio de Unión Fenosa.
La eficiencia energética de las pymes catalanas ha empeorado un punto respecto al año pasado y ha situado el dato de potencial de ahorro de energía en el 18,7%, lo que equivaldría a conseguir un ahorro global de hasta 262 millones de euros.
Esta es una de las principales conclusiones que se desprende del Indice de Eficiencia Energética en las pymes de Cataluña 2007 presentado ayer por Unión Fenosa, que también indica que este gasto se podría evitar en gran parte modificando elementos de equipamiento básico y algunos hábitos de consumo en las empresas.
El ahorro permitiría crear 10.340 puestos de trabajo y equivale a una energía total de 3.760 gigavatios/hora (GWh), que es aproximadamente 453 veces la energía que consume anualmente la Torre Agbar.
La no emisión de gases fruto de la producción de electricidad supondría recortar en 1,92 millones de toneladas al año el dióxido de carbono expulsado a la atmósfera, el equivalente al que absorberían 19 millones de árboles en este período.
Los resultados presentados ayer muestran como las pymes catalanas "suspenden" en el índice de eficiencia energética, en el que logran 3,2 puntos en una puntuación sobre 10, lo que supone una décima menos que la nota obtenida en 2006 y sitúa sólo por delante de Extremadura (3,0) y Canarias (3,1) e igualada con Aragón (3,2).
Esta cifra también es inferior a la media que reciben las pymes en España, dónde alcanzan los 3,5 puntos (+0,3 respecto al año anterior).
El director general de Unión Fenosa Comercial, Alfonso González de Heredia, ha explicado que las pymes en la actualidad deben mentalizarse para mejorar estos datos y ha asegurado que se puede conseguir un mayor ahorro económico a partir de la mejora de la eficiencia energética que en la discusión sobre las tarifas.
