El Gobierno ultima un plan de ayudas destinado al sector de la electrónica de consumo para evitar el cierre de nuevas empresas, como el de Samsung en Cataluña. El ministro de Economía, Rodrigo Rato, anunció ayer en Sabadell (Barcelona) que el Ejecutivo negocia con el sector "un programa de ayudas a la investigación y desarrollo", pero no avanzó el importe del plan.

Rato disertó sobre los nuevos retos de la economía española, entre los que destacó el de desvincular la evolución de los salarios de la inflación. "La remuneración del trabajo no debe estar ligada al contrato, sino a la productividad", dijo. Advirtió también a los patronos: "Si el planteamiento es pagar menos, no llegaremos a ninguna parte".