Ni La Caixa, ni el BBVA, como se había especulado. Al final ha sido el presidente del Santander, Emilio Botín, quien ha conseguido llevarse a sus filas al exdirector gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) y exvicepresidente económico del Gobierno del PP, Rodrigo Rato, por un sueldo anual de 200.000 euros. Rato se incorpora al grupo como miembro del consejo asesor internacional del banco, que se reúne dos veces al año, y como asesor para temas generales, informó el banco.

El exministro, además, empezará a trabajar a partir del 1 de febrero, a tiempo completo, como director general senior del banco internacional de negocios Lazard. Su trabajo consistirá en asesorar a clientes del banco en todo el mundo. Aunque Lazard tiene su sede principal en Nueva York, Rato trabajará, sobre todo, en Madrid y Londres y, aunque no ha trascendido la cuantía de su emolumento, podría rondar los tres millones de euros --que es lo que gana el otro director senior del banco, Vernon Jordan, exasesor de Bill Clinton--, que se sumarán a la pensión vitalicia de 54.536 euros anuales que recibe del FMI.

ADIOS A LA POLITICA El doble fichaje de Rato por dos bancos refuerza la idea de que ha dicho adiós a la política activa. Así lo interpretó ayer el portavoz socialista Diego López Garrido, quien opinó que Rato se aleja "definitivamente" del PP. El líder popular, Mariano Rajoy, aseguró que el Santander "ha tenido suerte" al fichar a Rato, porque "es un hombre de enorme competencia". Emilio Botín destacó que "su conocimiento de la economía, su experiencia y su visión global serán de gran valor".