Las transferencias bancarias que se realicen entre países de la zona euro son más baratas desde esta misma semana. El pasado martes entró en vigor un reglamento que establece un límite máximo de 0,25 euros por transacción y que fija como principio que estas operaciones no deben costar más que las que se realizan entre bancos de un mismo estado.

"Los bancos están obligados a aplicar las mismas tasas en los pagos con tarjeta nacionales y transfronterizos dentro de la zona euro", según el Banco Central Europeo. Fuentes del sector aseguran que las entidades no aplican diferencias con las transferencias entre países de la zona euro desde hace meses, y que el límite máximo fijado por el reglamento europeo --de 0,25 euros por transacción-- es "puramente orientativo".