El secretario de Estado de Hacienda, Miguel Angel Fernández Ordóñez, explicó ayer que el nuevo IRPF que surja de la reforma del 2005 acabará con "la injusticia gravísima" que supone la actual deducción por hijos pues --según el PSOE--, beneficia en mayor medida a la rentas más altas. Una de las opciones es trasladar la deducción a la cuota del impuesto. En su comparecencia en el Congreso defendió el cálculo de ingresos para el 2005. "Me juego lo que quieran. Vamos a tener esos ingresos, o ligeramente por encima", apostó. El director de la Agencia Tributaria, Luis Pedroche, dijo que el Gobierno aprobará en noviembre un plan de lucha antifraude, que se aplicará en el 2005, e incluirá cambios legales.